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La comunidad de Innovadores celebra el talento de los 10 jóvenes españoles más brillantes de 2015

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Los ganadores de "Innovadores menores de 35 España" comparten su trabajo y demandan "visibilidad" y "cambios en el sistema educativo" ante los representantes del ecosistema español e internacional

  • por Editores de MIT Technology Review en español | traducido por
  • 04 Diciembre, 2015

Foto: Los ganadores de Innovadores menores de 35 reciben sus trofeos y diplomas. Crédito: MIT TR en español.

Hay una gran diferencia entre otorgar un premio y crear una comunidad. MIT Technology Review en español busca lo segundo cada vez que elige a los Innovadores menores de 35 de un país. Este fue el hilo conductor de la ceremonia de entrega de premios de la 5ª edición de Innovadores menores de 35 España, que tuvo lugar ayer en la Fundación Rafael del Pino en Madrid.

Una vez finalizada la jornada, y como reconocimiento final a los ganadores, representantes de Endesa y Chivas, socios de Innovación y Social de MIT Technology Review en esta iniciativa, entregaron las menciones especiales. Carlos Castro, fundador de Leuko, recibió el galardón como Innovador del año y el reconocimiento al Innovador social recayó en Miguel Luengo, fundador de MalariaSpot.

La entrega de estas menciones especiales fue el colofón a una jornada en la que desde la mañana los ganadores de Innovadores menores de 35 España 2015 trabajaron en la definición de ideas para lograr fomentar la creación de nuevos talentos como los suyos. Cómo dar el salto desde el reconocimiento individual al trabajo en común para resolver los grandes problemas a los que se enfrenta la sociedad actual; esa fue la cuestión que abordaron siguiendo el modelo iniciado en octubre en el Summit Europe.

Para ello, los innovadores se dividieron en tres grupos de trabajo, thinkers, makers y mobilizers de acuerdo a los arquetipos de las tres características que definen a un innovador disruptivo: pensar ideas originales, llevarlas a la práctica, y lograr en la sociedad un cambio para mejor, respectivamente.

Las conclusiones a las que llegaron se presentaron en el primer panel de la ceremonia, moderado por Paloma Cabello, asesora sénior independiente de TPG Credit Funds y miembro del jurado de la competición. Como representante del perfil thinker, Ángel Alberich, fundador de QUIBIM, planteó cambiar el modelo en que se organizan los centros de investigación para enfocarlos en la resolución de problemas concretos, agrupando en ellos a científicos y creativos multidisciplinares, en lugar de agrupar en edificios separados a los expertos en distintas áreas de conocimiento.

Daniel Pardo, fundador de Farsens, fue el representante de los makers. Pardo quiso hacer hincapié en la necesidad de fomentar la educación en disciplinas tecnológicas desde una edad temprana, como los proyectos de CoderDojo. "Se enseña haciendo", afirmó, "y esta máxima se aplica no sólo a los niños sino a los políticos: el éxito de este tipo de iniciativas les mostrará el camino a seguir en la siguiente reforma educativa".

Finalmente, en representación de aquellos talentos capaces de conectar con la sociedad, Miriam Reyes, fundadora de Aprendices Visuales, recalcó que un innovador puede ser quien conecta unas ideas con las personas adecuadas y planteó la necesidad de exponer a los estudiantes a un ambiente lo más multidisciplinar posible. De este modo se podría dar la oportunidad de conocer la manera de trabajar diferente de cada materia y conectar empáticamente con las personas que se dedican a ellas. Para Cabello, “es el Parlamento Europeo el que tuvo la suerte de conocer a la comunidad de Innovadores, y no al revés”, refiriéndose al lugar en que se celebró el Summit europeo el 20 de octubre de este año.

Foto: Los innovadores trabajan conjuntamente en los grupos de la sesión de innovación de la mañana. Crédito: MIT TR en español.

El segundo panel de la ceremonia, dedicado a los innovadores españoles en tecnologías emergentes, tuvo entre sus ponentes a miembros ya veteranos de esta comunidad: Javier García Martínez, ganador de la edición global de Innovadores menores de 35 en 2007, David Horna, fundador de Aglaris Ltd. y Jorge Bravo, profesor de la Universidad Autónoma de Madrid, ambos ganadores de las ediciones españolas de 2012 y 2013 respectivamente.

Este panel estuvo moderado por Carmen Eibe, directora de Coordinación de Proyectos de PharmaMar y miembro del Consejo de EuropaBio en representación de ASEBIO. Eibe planteó a cada uno de los innovadores, así como a Ana Sáenz de Miera, directora de Ashoka España y Portugal, y Eduardo Díaz, director del Área de Emprendedores de Base Tecnológica de la Fundación madri+d, qué retos específicos encuentran para, a su juicio, convertir el talento en competitividad.

García Martínez, que también es fundador de la empresa de nanotecnología aplicada al sector energético Rive Technology, hizo hincapié en la idea de que el talento de una empresa no reside solo en su personal, sino también en sus inversores y clientes: “Ellos son quienes mejor conocen el mercado y cómo funciona tu tecnología, así que hay que aprovecharse de ello”, afirmó.

Díaz, por su parte, reflexionó sobre el rol de los actores institucionales que, a su juicio, deben ir por delante de la sociedad, buscar nichos que no se estén ofertando y crear instrumentos que los cubran, como redes de inversores o programas de incubación para proyectos recién nacidos.

Bravo sugirió la creación de un mecanismo "automático" institucional para permitir que toda innovación tecnológica en el ámbito académico pueda acabar teniendo una aplicación disruptiva en la sociedad de la mano de una empresa que la explote, algo similar a lo vivido en su experiencia en el MIT. Abundando en esta idea, Horna, rememoró su experiencia con una oficina de Transferencia Tecnológica española, que le insistió en patentar sus ideas y licenciarlas, ya que "nunca vas a fundar una empresa", cuando en realidad ya había creado dos.

Por su parte, Sáenz de Miera aportó el lado social, "siempre presente en todo innovador", e identificó un problema fundamental: "antes de preocuparnos en desarrollar y gestionar el talento, debemos identificarlo, y ahí las escuelas están fallando", afirmó. La directora de Ashoka propuso potenciar todos los tipos de inteligencia, "no sólo la lingüística y la aritmética" y lograr "que todos los alumnos terminen sus estudios habiendo identificado su talento y vocación".

Un modelo obsoleto
En el tercer panel de la tarde, Pedro Moneo, director de MIT Technology Review en español, y Anant Agarwal, director ejecutivo de edX, discutieron sobre el potencial de esta plataforma de educación abierta online creada por iniciativa de MIT y Harvard y el cambio radical que está viviendo la educación superior en los últimos tiempos. "Hoy existen profesiones, como científico de datos, que hace siete años no existían", reflexionó Agarwal. "El modelo de estudiar durante cuatro años y dedicarte el resto de tu vida a una profesión basada en esos estudios está obsoleto", sentenció. 

En su opinión, las plataformas abiertas de educación online son la mejor solución para lograr un acceso a una educación continua y resaltó positivamente el grado de adopción que están teniendo en España. "El Gobierno debería plantearse, como ya se hace en otros países, crear una plataforma nacional de estas características", afirmó (ver Los MOOC cubren el vacío de las universidades en India).

Intercalados entre estos tres paneles, los ganadores de esta edición de los premios hicieron sus elevator pitches en dos tandas, permitiendo a la audiencia conocer los avances por los que se les otorga este reconocimiento: ayudar a que los niños con autismo se integren y aprendan de una manera más adecuada a sus necesidades; tener bajo control de una manera no invasiva el nivel de las defensas de los enfermos de cáncer tratados con quimioterapia; eliminar las imprecisiones y los juicios subjetivos en el diagnóstico por imagen; un sistema operativo accesible a través de una página web que permite trabajar en cualquier dispositivo electrónico como si fuese el ordenador de la oficina; nuevos materiales capaces de eliminar fotoquímicamente contaminantes del agua...

El responsable de Innovación de Endesa, Juan Garrigosa, entregó el diploma a Castro, Innovador del año, y Antonio Crous, líder de Márketing de Chivas, hizo lo propio con Luengo, Innovador social. El cierre corrió a cargo del director de la Fundación Rafael del Pino, Vicente Montes, quien agradeció a todos los presentes el interés mostrado en esta iniciativa y aprovechó para dirigirse al resto de organizadores: "lo importante es empezar a preparar ya la edición del próximo año".

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