Google y Facebook han informado de que han empezado a automatizar el proceso de eliminar los vídeos extremistas de sus páginas web. Mientras que ninguna de las dos empresas ha confirmado esta práctica, varias fuentes informan a Reuters de que estas empresas están empleando técnicas similares a las que se utilizan para identificar y eliminar contenidos protegidos por derechos de autor de internet.

El proceso que se cree que están usando se conoce como hashing, o funciones de resumen. Son operaciones matemáticas que asignan un valor de un largo fijo, conocido como hash, a una cadena de datos de un largo arbitrario, como un vídeo o un fragmento de ADN. Los mismos archivos o cadenas de ADN recibirán el mismo hash, lo que permite a los ordenadores a divisar duplicados fácil y rápidamente.

En el pasado, empresas como YouTube y Dropbox han empleado la técnica para detectar archivos protegidos por derechos de autor: el propietario de los derechos simplemente proporciona el hash del material que desea proteger, y la página web elimina cualquier archivo subido a sus servidores que comparta ese hash. Según Reuters, Facebook y YouTube están empleando el mismo enfoque para bloquear vídeos extremistas que son republicados en sus páginas.

Lo que está menos claro es cómo se identifican los vídeos extremistas por primera vez. Algunos pueden ser señalados por usuarios. Pero no se conoce cuánto esfuerzo humano se invierte en revisar los vídeos para encontrar los contenidos potencialmente extremistas, ni si existen procesos automatizados en operación para minar vídeos y divisar imágenes no deseadas. En el momento de redacción de este artículo, ni Google ni Facebook había respondido a nuestras peticiones de comentarios.

Estas iniciativas emergen mientras los políticos realizan cada vez más llamamientos a Silicon Valley (EEUU) para que ayude en la lucha contra el terrorismo. El año pasado, Hillary Clinton pidió a las empresas tecnológicas que sean "disruptivas" contra ISIS. Y más recientemente algunos miembros de la administración Obama se reunieron con ejecutivos de Facebook, Twitter, Microsoft, LinkedIn, YouTube y Apple para tramar un plan para "dificultar que los terroristas [utilicen] internet para recultar, radicalizar y movilizar a sus seguidores a la violencia". Este mes, Clinton reiteró: [Como presidenta] "trabajaré con nuestras grandes empresas tecnológicas... para mejorar nuestra capacidad de interceptar las comunicaciones de ISIS, rastrear y analizar las actualizaciones en redes sociales y mapear las redes yihadistas".

Facebook y Google desde luego disponen de suficientes datos para realizar un perfil de cada usuario con un minucioso nivel de detalle. Por tanto, según sostienen los políticos, también podrían emplearlos para identificar patrones dentro de los datos que puedan ser empleadas para detectar amenazas terroristas. Eliminar vídeos republicados no es lo mismo, claro está. Pero podría señalar que Silicon Valley está empezando a prestar atención a la llamada Washington D.C. (EEUU).

(Para saber más: Reuters, Google y Facebook podrían hacer mucho más para luchar contra el terrorismo islámico, EEUU ruega a Silicon Valley que vuelva a cooperar en la lucha contra el terrorismo en internet, Los grupos asociados al terrorismo en Facebook se disparan antes de un ataque)