.

Tecnología y Sociedad

Cuando los particulares se convirtieron en hoteleros con la revolución AirBnB

1

El turismo es uno de los sectores más afectados por la tecnología desde que las agencias de viajes empezaran a desaparecer frente a internet

  • por George Anders | traducido por Teresa Woods
  • 08 Octubre, 2015

Greg Bugay y su esposa Lorraine son residentes de Fort Lauderdale, Florida (EEUU), que se encuentra a poca distancia del océano Atlántico. Sus hijos ya son mayores, y les sobra espacio en casa. Hace una década, los dormitorios sobrantes en lugares turísticos permanecían inutilizados. Ya no. Hoy, la conectividad digital ha creado una sencilla profesión nueva para 1,1 millón de personas en todo el mundo: el alquiler de dormitorios durante estancias de varios días mediante la plataforma de reserva de alojamientos de Airbnb.

Los Bugay han ejercido esta nueva profesión a la perfección. Están entre los anfitriones más activos de Airbnb, alquilando con tanta frecuencia que sus dormitorios sobrantes gozan de una tasa de ocupación del 92%. Apenas necesitan realizar ninguna acción de marketing; las evaluaciones de más de 170 huéspedes siguen mandándoles nuevos clientes. En total, los Bugays calculan que ingresan unos 90.000 dólares (unos 80.000 euros) al año en beneficios.

El software de Airbnb es tan eficiente a la hora de organizar el calendario de reservas que Bugay calcula que sólo necesitan dedicar unas cinco horas a la semana a la gestión de su negocio de alquiler. Unos minutos para la correspondencia por correo electrónico, un poco de tiempo social dedicado a sus huéspedes en las comidas o jugando a las cartas, una colada entre huésped y huésped, y voilá – listos para empezar el ciclo de nuevo. Si los huéspedes no hablan mucho inglés, dice, "utilizamos Google Translate para tomarles el pedido del desayuno o darles consejos acerca de las actividades turísticas".

Airbnb, con sede en San Francisco (EEUU), no es la única empresa que gestiona un mercado digital para alquileres del estilo hotel dentro de las casas de la gente. Otros líderes del sector incluyen VBRO, HomeAway y FlipKey. Pero Airbnb, que empezó como un anuncio improvisado online de tres compañeros de piso en 2008, se ha convertido en el líder de esta categoría. Opera en 34.000 ciudades del mundo y ha servido a más de 40 millones de clientes hasta la fecha. Este año inversores privadas ayudaron a financiar el crecimiento continuado de Airbnb, que ya había sido valorada en 26.000 millones de dólares (unos 23.300 millones de euros), más de lo que reclaman las cadenas hoteleras longevas de Hilton y Marriot en las bolsas públicas.

No todos ganan tanto dinero con Airbnb como los Bugays: menos del 5% de sus anfitriones serían clasificados como "superanfitriones". El propietario medio de ciudades como Londres (Inglaterra) o Sídney (Australia) gana algo menos de 5.000 dólares (unos 4.500 euros) al año, según los calculos de Airbnb, por el alquiler intermitente de uno o dos dormitorios. Y el negocio no carece de controversia. Violentos encuentros entre huéspedes y anfitriones proporcionan titulares periódicamente, aunque Airbnb dice que sus sistemas de investigación están diseñados para evitalo. Los ayuntamientos quieren que Airbnb cobre impuestos hoteleros, cosa que en principio la empresa está dispuesta a hacer, mientras que los defensores de la vivienda asequible a veces argumentan que el alza de los alojamientos de Airbnb está dificultando la vida a todas las personas que alquilan un piso. Un referéndum de San Francisco programado para noviembre pondrá a prueba si los votantes quieren frenar a los anfitriones más activos de Airbnb.

Cuando la adopción masiva de conectividad a internet se arraigó hacia finales de la década de 1990, la industria del turismo a menudo servía de ejemplo de un área donde las eficiencias aportadas por las nuevas tecnologías estaban eliminando empleos. Los agentes de viaje perdían frente a las reservas hechas por el consumidor directamente en internet; las tradicionales guías de viaje perdieron su atractivo frente a la competición de vídeos de YouTube y las evaluaciones de TripAdvisor. Pero mientras los viajeros ahorradores hacen uso de Airbnb y servicios similares, los despidos hoteleros pueden verse compensados por las oportunidades dentro de este nuevo sector informal.

Puede que Airbnb incluso esté creando un nuevo ecosistema emprendedor. Para los anfitriones que no quieren molestarse con las confirmaciones por correo electrónico (o el cambio de sábanas), han surgido servicios como Pillow, una start-up que intenta ayudar a los propietarios con la gestión de sus propiedades. Estas empresas emplean a más personas, en servicios de limpieza y apoyo administrativo, a cambio del 15% del importe de la reserva.

Este artículo pertenece al Informe Especial: El futuro del empleo

Tecnología y Sociedad

Los avances tecnológicos están cambiando la economía y proporcionando nuevas oportunidades en muchas industrias.

  1. ¿Está la robótica a punto de vivir su momento ChatGPT?

    Los investigadores están utilizando la IA generativa y otras técnicas para enseñar a los robots nuevas habilidades, incluidas tareas que podrían realizar en los hogares.

    Stretch Robot Presents a Rose in its gripper
  2. Cómo las baterías térmicas están caldeando el almacenamiento de energía

    Los sistemas, que pueden almacenar energía limpia en forma de calor, fueron elegidos por los lectores como la undécima tecnología emergente de 2024.

    Dos ingenieros con batas de laboratorio controlan la batería térmica que alimenta una cinta transportadora de botellas.
  3. Probar fármacos, crear bioordenadores y otros usos de los organoides

    Los científicos utilizan organoides para analizar candidatos a fármacos, cultivar virus, construir bioordenadores y mucho más

    Probar fármacos, crear bioordenadores y otros usos de los organoides