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El cuerpo humano como medio para la autenticación a corta distancia

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Un sistema de autenticación que usa el cuerpo para asegurar armas y aparatos electrónicos.

  • por Rachel Metz | traducido por Lía Moya (Opinno)
  • 21 Marzo, 2013

Si dejas un arma al alcance de la mano, cualquiera que la coja podría dispararla. Sin embargo, eso podría cambiar con la nueva tecnología anunciada por Microchip Technology, que usa el cuerpo como parte de un proceso de autenticación seguro.

BodyCom, anunciado por la empresa la semana pasada, es un sistema de comunicación de corto alcance que usa el cuerpo como cable entre dos puntos. En el ejemplo mencionado anteriormente, esos puntos serían un pequeño mando que llevaras en el bolsillo y una almohadilla colocada en el arma de fuego.

El fabricante de chips, cuya sede está en Chandler, Arizona (EE.UU.), cree que su método de autenticación es más barato, sencillo y suele consumir menos energía que otros, todos ellos factores que espera animarán a los fabricantes de aparatos a incorporarlo en sus productos.

Edward Dias, gerente de desarrollo de negocio de seguridad en Microchip afirma que la empresa imagina toda una variedad de aplicaciones de seguridad para BodyCom. Con la tecnología instalada, podrías abrir la puerta de tu casa simplemente tocando el pomo; las herramientas eléctricas y las armas podrían asegurarse de tal forma que solo un usuario con el mando adecuado conseguiría que funcionasen. (La idea es parecida a la “pistola inteligente” RFID equipada con biométrica a la que están dando vueltas algunos legisladores). BodyCom también se  podría usar para las mascotas: un mando montado en un collar podría permitir a la mascota abrir la puerta para mascotas con la nariz o la pata, pero los animales de fuera no podrían entrar.

Según Dias, ya hay una empresa en Italia que usa BodyCom para asegurarse de que los motociclistas no puedan arrancar sin el casco puesto. Los mandos-llave llave se incorporan a los cascos, mientras que el manillar de la moto funciona como estación base.

Como reconoce el propio Dias, la idea no es completamente nueva. Thomas Zimmerman  ya describió las "redes de área personal" que usan el cuerpo para permitir el intercambio de datos entre distintos aparatos electrónicos en su tesis en el Instituto de Tecnología de Massachusetts, por ejemplo, pero el concepto aún no se ha popularizado.

BodyCom usa acoplamiento capacitativo para transmitir una señal entre un mando de bolillo y una estación base, con tu cuerpo en medio. Si llevas el mando encima y tocas una estación base incrustada en el pomo de una puerta, por ejemplo, la base envía una señal de 125 kilohercios a través de tu cuerpo al mando para despertarlo. A continuación el mando envía una señal de autenticación de ocho megahercios de vuelta a la base para dar el visto bueno a tu acceso.

Dias explica que se usan esas dos frecuencias porque se acoplan bien con el cuerpo humano. Mientras que la instalación actual de BodyCom requiere que el usuario toque el panel, se puede montar de tal forma que el usuario sea autenticado a una distancia de unos centímetros.

En la actualidad, la tecnología, que costaría 3 o 4 dólares (unos 2,25 - 3 euros) incorporar a un aparato, no puede determinar si la persona con el mando es la persona a la que hay que conceder la autorización. Pero Dias afirma que Microchip podría añadir esa característica en el futuro.

Más allá de las cerraduras de casa, las herramientas de bricolaje y las armas de fuego, Dias espera que BodyCom aparezca en los sistemas de entrada sin llave pasivos como los que tienen algunos coches.  También imagina una red de área personal en el que un paciente médico cubierto con varios sensores pudiera transmitir datos de forma inalámbrica a una unidad principal.

Chris Harrison, estudiante de doctorado en el Instituto de Interacción entre Computadoras y Humanos de la Universidad Carnegie Mellon (EE.UU.), y cofundador de una start-up cuya tecnología de pantalla táctil es capaz de distinguir los toques de nudillos de los de la yema de los dedos, está pensando en la misma línea. Como cada vez llevamos más aparatos electrónicos encima, por ejemplo un reloj inteligente o Google Glass, se imagina que BodyCom podría permitir que estos aparatos se comunicasen entre sí usando el cuerpo como medio.

Esto podría ser más inteligente y más eficiente en términos energéticos que Bluetooth, afirma, puesto que sacar el mando del bolsillo te desconecta de la red.

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