.

Otros

Intel presenta una nueva tecnología de datos inalámbrica de alta velocidad

1

Pequeñas estaciones base podrían lograr importantes aumentos de la capacidad de transmisión de datos

  • por David Talbot | traducido por Lía Moya
  • 25 Febrero, 2014

Intel afirma haber creado un prototipo de agrupación de antenas basado en chips que cabe en una estación móvil base del tamaño de un tetrabrik. Esta tecnología podría servir para potenciar las redes inalámbricas del futuro al usar frecuencias UHF.

La tecnología de Intel, conocida como agrupación modular de antenas de ondas milimétricas, se ha presentado en el Congreso Mundial Móvil de Barcelona esta semana, explica el director de los estándares para ondas milimétricas y para tecnología avanzada de Intel, Ali Sadri.

La tecnología podría usar las capacidades ultrarrápidas que Samsung y los investigadores de la Universidad de Nueva York (EEUU) demostraron el año pasado usando equipo a escala de laboratorio y empaquetarlas en un aparato del tamaño de una cajita. La idea es que las ciudades se cubrieran con estaciones base así de pequeñas -una cada manzana o cada dos manzanas- que pudieran manejar inmensas cantidades de datos a corta distancia.

Una única antena de este tipo podría enviar y recibir datos a velocidad de más de un gigabit por segundo hasta unos cientos de metros (y mucho más a distancias más cortas) en comparación con los 75 megabits por segundo del último estándar, que se conoce como 4G LTE.

Para las comunicaciones móviles, tanto la tecnología de Intel como la de Samsung podrían acabar usando frecuencias de 28 o 39 gigahercios o más altas. Estas frecuencias se conocen como ondas milimétricas y llevan muchos más datos que los que se usan en las redes móviles actuales. Pero estas ondas quedan bloqueadas fácilmente por los objetos del entorno, incluso por las gotas de agua en el aire. Así que hasta ahora se han considerado poco prácticas para los dispositivos móviles.

Para resolver el problema del bloqueo, unos procesadores van dando forma a la señal de forma dinámica entre 64 o incluso 128 elementos de antena, controlando la dirección en la que se envía el haz desde cada agrupación de antenas, haciendo cambios sobre la marcha en respuesta a condiciones cambiantes.

Hay varios grupos trabajando en este tipo de agrupaciones de antenas, pero Intel afirma que su versión es más eficiente. "Podemos escalar la cifra de series modulares tanto como resulte práctico para aumentar la sensibilidad transmisora y receptora. Los únicos problemas posibles son legislativos, no tecnológicos", afirma Sadri.

Uno de los principales problemas es averiguar cómo meter tantas antenas en un dispositivo móvil. La tecnología de la Universidad de Nueva York usaba un aparato grande que arrastraron por las aceras de Manhattan para probarlo. Guía los haces de forma mecánica hacia los usuarios objetivo. El chip de Intel hace lo mismo dando forma a la dirección de la señal electrónicamente y ahora está empaquetado en un aparato más pequeño que una caja de zapatos.

Hay toda una serie de empresas que apuestan porque las tecnologías inalámbricas de la próxima generación tendrán que usar enlaces de ondas milimétricas para poder entregar todos los datos que la gente quiere. La Comisión Europea, por ejemplo, ha financiado un proyecto de investigación en 5G con unos 1.300 millones de euros en fondos el año pasado para ayudar a desarrollar esta y otro tipo de tecnologías.

Otros

  1. Conozca a los buzos que intentan averiguar la profundidad a la que puede llegar el ser humano

    Averiguar cómo puede soportar el cuerpo humano la presión bajo el agua es un problema desde hace más de un siglo, pero un grupo de buceadores está experimentando con hidrógeno para averiguarlo

  2. La era del helio barato ha terminado y eso ya está causando problemas

    El helio es crucial para todo tipo de tecnologías, incluidos los escáneres de resonancia magnética y los semiconductores. Pero se produce en muy pocos lugares

  3. Del telégrafo a Starlink: así ha roto la tecnología inalámbrica el aislamiento de la Antártida

    El séptimo continente siempre ha sido un lugar sombrío y desconectado. El Internet por satélite de Elon Musk lo está cambiando, y la gente quiere ver cómo es la vida allí