Gracias a iRobot, la idea de que un robot aspire tu suelo ya no parece futurista, y la empresa ya ha vendido más de 10 millones de sus Roomba en todo el mundo. Pero la mayor parte de las tareas domésticas están muy lejos de las capacidades de cualquier robot que exista en el mercado. Los ingenieros de los laboratorios de I+D de iRobot esperan que eso cambie desarrollando tecnología que permita a los robots entender su entorno e interactuar con él. El director tecnológico de la empresa, Paolo Pirjanian, se reunió con Tom Simonite de MIT Technology Review la semana pasada para contárselo.

Afirman querer que los robots se encarguen de más tareas domésticas. ¿Qué tecnologías tienen que desarrollar para que sea posible?

En la robótica, el eslabón perdido es la manipulación barata. La manipulación tiene más éxito en la industria, donde se usan motores de alta precisión, articulaciones rígidas y pinzas que no serían seguras en un entorno doméstico. En ese mundo, barato son decenas de miles de dólares. Nosotros estamos trabajando para hacer que la manipulación sea mucho más barata, con partes de plástico, por ejemplo, y no de acero, que admitan menos precisión (ver "Las articulaciones robóticas necesitan rebajas").

La navegación es otro área clave, porque permite a los robots moverse libremente y con inteligencia. En el mercado de consumo, el sistema de navegación más vanguardista es Northstar, que usa nuestro robot Braava. Proyecta puntos infrarrojos sobre el techo que actúan como guías. La próxima generación en la que estamos trabajando usa una cámara combinada con sensores de inercia, igual que en un móvil. Usará fotos para buscar hitos de navegación y se puede ampliar a zonas más grandes, incluso en el exterior.

También nos está ayudando la disponibilidad de sensores 3D baratos. Si combinas las fotos con un mapa en 3D de una habitación, consigues algo parecido a una maqueta CAD o un entorno de videojuego. Esto permite una mayor autonomía al robot porque es capaz de comprender cosas como dónde está la puerta o la pata de la silla; podría permitir a los robots entender el entorno hasta el nivel de los objetos individuales. Ese tipo de mapa también nos proporciona un leguaje común para que robot y humano puedan comunicarse. Yo puedo decir: "No entres en este cuarto", "friega la cocina los martes" o incluso "encuentra este libro".

¿Realmente pueden hacer un robot lo suficientemente inteligente como para hacer eso?

Para tener un mapa muy fiel hará falta mucha capacidad de almacenaje. Y no se concibe un sistema que permita a un robot comprender cientos de miles de objetos. Pero la nube puede tener toda esa información. Un robot puede usar la nube para empezar a aprender cosas sobre su entorno. Por ejemplo, este objeto es un vaso y por lo tanto tengo que cogerlo así; parece cristal, así que tengo que sujetarlo con la fuerza suficiente como para que no se resbale, pero sin apretar tanto como para que se rompa.

¿Qué podrían hacer en nuestros hogares los robots construidos con esta tecnología?

Donde tienen más valor es en las denominadas tareas domésticas, cosas que hay que hacer una y otra vez. La investigación del mercado de consumo nos dice que la colada es la tarea doméstica en la que más tiempo pasa la gente, así que un robot para la colada sería el primero de la lista. Pero para eso queda mucho. Antes de eso podríamos pasar del Roomba a otras superficies y cosas que tenemos que limpiar, las ventanas, por ejemplo, o la bañera y la ducha. Gracias a nuestro negocio con la administración y con defensa, tenemos mucha experiencia con aparatos que trabajan en entornos externos muy duros, así que no cuesta imaginarnos saliendo al jardín.

Y si te fijas en nuestro robot de teleconferencias para empresas, Ava, que es capaz de navegar solo, también puedes imaginar un robot que uses para mantenerte en contacto con o asistir y vigilar a personas que no pueden salir de casa. Si yo tuviera una abuela en Florida -EEUU- de la que no sé nada hace tiempo, podría pedirle al robot que la encontrara y me llamara para poder ayudar. O quizá a un servicio de atención médica capaz de hacerlo.