.

Varios investigadores están utilizando una tecnología de seguimiento de actividad para encontrar cómo mejorar la salud de los empleados.

Aparecen novedosos programas de análisis de datos que sirven para saber si los empleados son una ayuda, un elemento tóxico o tienen madera de líderes, y también para saber qué tal funciona la empresa.

Un motor de búsqueda renovado podría devolver resultados diferentes dependiendo de si hemos investigado un tema con anterioridad.

Los planetas rocosos de tamaño casi tan grande como Urano parecen mucho más comunes de lo que nadie sospechaba.

El futurólogo jefe de Cisco predice la aparición de ayudantes personales en forma de avatares digitales y más.

La técnica podría ofrecer una forma de dar mayor utilidad a los historiales médicos informatizados.

Un estudio revela que con tres o cuatro planes de precios bastaría para crear mejores opciones para los consumidores y beneficios (casi) óptimos para los proveedores.

Un nuevo programa de ordenador predice con precisión el comportamiento de materiales propuestos, lo que implica un desarrollo más rápido de nuevos aparatos electrónicos y células fotoeléctricas.

Una membrana con nanoporos crea cultivos más rápidos y fiables para todo tipo de uso: desde análisis hospitalarios hasta controles de calidad del agua.

Los fabricantes están probando un sistema de detección de ondas cerebrales que dispara una alarma cuando detecta somnolencia.

Un estudio pone de relieve velocidades lentas de descarga, usos excesivos de la batería y fallos de seguridad.

Los ánodos de naotubos podrían permitir crear baterías para teléfonos móviles y ordenadores portátiles con más energía y que se carguen más rápidamente.

La abundancia de dispositivos móviles está impulsando avances en aplicaciones de oficina basadas en la nube, construidas para la pequeña pantalla.

Investigadores y empresas están desarrollando algoritmos para predecir el mejor momento para comprar nuevos productos tecnológicos de consumo.

A Autonomy se le da muy bien analizar las ingentes cantidades de datos "sin estructurar" que se producen a diario.

Hoy día las empresas tienen que comunicarse a través de una vertiginosa variedad de canales.

Los grandes volúmenes de datos actuales están forzando a los investigadores a encontrar nuevas técnicas para el descubrimiento de conocimientos y la extracción de datos.

Investigadores esperan que un microchip que imita el funcionamiento básico del cerebro pueda llevar a cabo cálculos complejos con muy poco consumo energético.

Nuevas aplicaciones permiten a los usuarios de medios sociales conectarse a través de diferentes canales.

Próximamente se lanzará en Estados Unidos una televisión que informa a los sitios web y a los anunciantes en línea de qué programas estamos viendo.