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Innovadores menores de 35

Emprendedores

Conoce a los jóvenes que intentan transformar las innovaciones en negocios disruptivos

Anson Tou (Perú), 26

Qempo

Conecta a compradores peruanos con viajeros que visitan el país para facilitar las compras internacionales de forma sencilla y económica

En los últimos años, el comercio electrónico (o e-commerce) ha experimentado un gran crecimiento en los países de América Latina y el Caribe. Según un estudio realizado por Tecnocom, el volumen de ventas se cuadriplicó en la región en sólo cinco años, generando alrededor de 66.700 millones de dólares (56.241 millones de euros) el año pasado. Sin embargo, las altas tasas aduaneras, el exceso de trámites burocráticos y la falta de métodos de pago electrónico adaptados a los clientes son grandes obstáculos para el comercio transfronterizo. Empresas como Amazon y Fedex se ven obligadas a mantener políticas de envíos internacionales muy rígidas que, en ocasiones, se traducen en una limitada oferta de productos, unos altísimos costes de envío y un extendido plazo de entrega

Para mejorar la situación, el empresario y emprendedor Anson Tou ha creado Qempo, una plataforma web que conecta a compradores en línea peruanos con viajeros que se desplazan al país para facilitar las compras internacionales y que le ha convertido en uno de los Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2017 de MIT Technology Review en español. El funcionamiento es sencillo: a través de la plataforma, un cliente interesado en realizar una compra internacional puede ponerse en contacto con un viajero que planee visitar Perú y disponga de espacio disponible en su equipaje. El viajero compra y trae consigo el pedido del cliente y a cambio se lleva una comisión.

En solo unos pocos años de operación, Qempo ha logrado reducir los gastos de envío estándar en un 50% y el tiempo en envío en un 80%. Según el joven emprendedor, "empresas como Fedex y DHL suelen cobrar alrededor de 50 dólares (unos 40 euros) por mandar un paquete de un kilo, lo que a veces supone el doble del precio del producto". Dadas los altos costes por parte de empresas tradicionales de envío, el joven peruano empezó a buscar métodos alternativos. Sin ninguna inversión inicial y apoyándose únicamente en un foro tecnológico y una simple página web informativa, empezó a contactar con varios clientes de manera casual. En solo unos años, logró facturar más de medio millón de dólares.

Nacido en el seno de una familia que emigró a Perú desde China en la década de 1980, Tou ayudó desde muy pequeño en el restaurante familiar. El joven recuerda: "Mis padres fueron unos grandes emprendedores. Ellos me enseñaron el valor del esfuerzo". Ayudando en el servicio pudo desarrollar sus habilidades sociales y su deseo de conectar a gente. Estos valores se ven reflejados en su modelo de negocio. El joven afirma: "Darle un trato de excelencia al cliente es nuestra política más importante", y una que le ayuda a diferenciarse de sus competidores en el mercado.

A los 17 años se mudó a Estados Unidos para estudiar Administración de Empresas y Negocios Internacionales. Desde allí, empezó un servicio de importación para mandar productos a Perú. Tou recuerda: "Qempo empezó como un favor. Un hobby para apoyar a amigos y familiares que no podían acceder a muchos productos de Estados Unidos". Con algo de experiencia previa en el mundo del servicio al cliente y administración, Tou fue aplicando los conocimientos adquiridos en sus estudios a su empresa y "sin querer queriendo, Qempo se convirtió en un negocio", detalla el joven.

Perú es la cuarta economía en América Latina con el impuesto general a las ventas (IGV) más alto, de un 18%. Este porcentaje, sumado al impuesto ad-valorem, hace que los clientes de Perú paguen casi el doble por los costes aduaneros con empresas de logística convencionales. Tou y su equipo analizaron toda la política de importación del Gobierno peruano y de las aduanas en los diversos países y comprobaron que existía una gran diferencia de costes entre viajeros con equipaje y envíos por carga. El emprendedor detalla: "Vimos una oportunidad para reducir los costes y los plazos de entrega. Nuestros pedidos tardan una semana como máximo y nuestros viajeros ganan una media de 300 dólares (unos 250 euros) por viaje".

El camino no ha sido fácil. "Han sido varios los desafíos. Uno de los mayores retos fue ajustarse a las diferencias culturales entre Estados Unidos y Perú. Son culturas muy distintas y es necesario adaptarse a cada una para establecer lazos de confianza entre clientes", relata Tou. Y añade: "Hemos adaptado nuestros métodos de pago, ofreciendo la posibilidad de pagar con depósitos bancarios y en efectivo. No todos los clientes están dispuestos a comprar en línea". En estos momentos, el equipo de Tou está trabajando con el Gobierno peruano para pagar los impuestos fronterizos antes de que se efectúe el viaje con el fin de facilitar el proceso burocrático y reducir aún más el tiempo de espera en las aduanas.

En los próximos meses tienen pensado lanzar Qempo en China, lo cual entusiasma mucho al joven peruano debido a sus raíces chinas. En un futuro, Tou tiene como objetivo conectar toda América Latina para después poder expandirse por todo el mundo.

En opinión del director de desarrollo de negocio en Corporación GPF (Ecuador) y miembro del jurado de Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2017, Jeffry Illingworth, "el concepto de capitalizar esa capacidad disponible del equipaje de los pasajeros para mover mercadería ofrece un modelo de negocio exitoso con una gran oportunidad de aplicarse a otros países".

Por Juan Ruiz (La Grieta)