Actualizado para incluir los comentarios de Microsoft.

Los anuncios de farmacias que aparecen en los resultados laterales de búsqueda de Bing, el motor de búsqueda de Microsoft, están dominados por compañías “clandestinas”, según un informe emitido ayer por KnujOn, una compañía dedicada al análisis del spam, y LegitScript, una firma que verifica las farmacias por internet.

El informe investiga los anuncios que aparecen cuando una persona introduce términos de búsqueda tales como “medicamentos genéricos” o “farmacia por internet” en Bing. De los 69 anunciantes que la compañía investigó, sólo siete fueron clasificados como legítimos. Los 62 restantes no requerían receta, lo que viola las leyes de los EE.UU., no poseían una dirección en el país u ofrecían enviar los medicamentos desde fuera de los EE.UU.

“Fuimos capaces de conseguir un medicamento que necesita receta aún sin tenerla, y algunos eran falsos,” afirma John Horton, fundador de LegitScript. LegitScript afirma que más de 40.000 farmacias por internet no cumplen con las certificaciones de la Asociación Nacional de Juntas Farmacéuticas (NABP), que estipula que las compañías posean una licencia farmacéutica válida, una sede en los Estados Unidos y sólo dispensen medicinas con una receta válida.

Para algunos medicamentos, las leyes federales obligan a no sólo tener una receta sino a que el doctor que la recetó tenga una relación verdadera con el paciente, normalmente un contacto cara a cara durante el que se comparte información médica. La Administración de los EE.UU. para la Ordenación de los Medicamentos también recomienda a los consumidores que compren productos farmacéuticos sólo de compañías que tengan sede en los EE.UU., que requieran una receta, y que tengan licencia de la NABP. Estas regulaciones pretenden prevenir el abuso de los fármacos con receta y los peligros que tomar este tipo de medicinas sin regulación, que pueden estar adulteradas, caducadas o ser tóxicas.

Muchos de los anuncios farmacéuticos de los principales motores de búsqueda no cumplen los estándares, afirma Bruen. “Casi el 90 por ciento de los anuncios de farmacias que revisamos eran de farmacias falsas. Esto ya lleva tiempo ocurriendo,” añade.

El nuevo informe examinó 10 farmacias online con detalle y confirmó a través de las páginas de preguntas más frecuentes o a través del chat en directo que no se necesitaba una receta para obtener medicamentos que están obligados a tenerla. En dos casos, los investigadores compraron fármacos de receta, y uno de ellos resultó ser falso.

Si echas un vistazo a los principales motores de búsqueda, encontrarás anuncios de farmacias que no son legítimas, y que venden sustancias controladas,” afirma Susan Foster, vice presidenta y directora de política de investigación en el Centro Nacional de Adicciones y Abuso de Sustancias (CAMA) en la Universidad de Columbia.

Tanto Bing, Google como Yahoo verifican la legitimidad de las farmacias por internet utilizando PharmacyChecker, que cubre farmacias extranjeras además de las que tienen su base en EE.UU. Para que una farmacia por internet cumpla con los estándares de PharmacyChecker tiene que poseer una licencia de una junta de farmacias, pedir recetas basadas en reuniones cara a cara entre el paciente y el médico, cumplir con las leyes de privacidad, y tener información de contacto válida además de una cantidad de encriptación suficiente.

PharmacyChecker también cubre las farmacias canadienses, puesto que pasan por un tipo de regulación tan rigurosa como la que aplica la FDA, según Tod Cooperman, presidente de PharmacyChecker. “Ninguna de esas 10 farmacias [examinadas en el informe] son miembros aprobados del programa PharmacyChecker,” afirma Cooperman. No pudo dar una explicación sobre por qué los anuncios de farmacias no verificadas se muestran en los resultados de Bing.

“No deberían anunciar ninguna empresa farmacéutica hasta que averigüen cómo regularlo,” afirma Bruen. “Deberían requerir que cualquier que utilice nombres de fármacos específicos en sus criterios de búsqueda también muestren su licencia farmacéutica y una sede física.”

Para vender anuncios, los motores de búsqueda normalmente hacen una subasta de ciertas palabras clave de búsqueda, y los términos populares como “Viagra” cuestan más. Cada vez que un usuario hace clic en un anuncio de búsqueda, el vendedor paga al motor de búsqueda una cuota, que va desde unos pocos centavos hasta unos cuantos dólares, dependiendo de la palabra clave. Con este sistema de subastas, Horton sugiere que la abundancia de farmacias ilegales puede que supere a las legítimas. “Si los fármacos que venden son falsos o imitaciones, eso significa que sus costes son menores que los de las farmacias legítimas,” afirma Horton. “Las farmacias por internet clandestinas tienen más dinero para poder apostar en publicidad y subir las cuotas de subasta, lo que supone un detrimento para los anunciantes legítimos.”

Bruen, que se encarga de vigilar a las redes de spam organizadas y de gran tamaño, también descubrió que muchas farmacias online están unidas a grupos de spam. Al fijarse en los registros de dominios, descubrieron que algunas farmacias estaban localizadas en Rusia, India o Panamá, a pesar de decir que estaban basadas en otros sitios.

E.J. Hilbert, antiguo agente del FBI y director de seguridad online de Epic Advertising, afirma que los motores de búsqueda no deberían permitir a los anunciantes mostrar la dirección de una página web y después dirigir al usuario a otra diferente. “¿Por qué llamarlo dailymedrx.com cuando te redigire a k2med.com, que está basada en Rusia?” se pregunta. Hilbert también sugiere que los motores de búsqueda deberían chequear los nombres de dominio de sus anunciantes para ver dónde están basados realmente. “Si un anunciante está pujando mucho más por una palabra clave como “Viagra” que otros, puede que sea una señal de advertencia de que es una empresa ilegítima, añade.

“El mercado de anuncios online es un negocio de miles de millones de dólares,” afirma Hilbert. “El modelo de beneficios se basa en aquello de ‘pon el anuncio y que el comprador tenga cuidado,’ en vez de tener al consumidor en mente.”

El año pasado, la NABP, la Asociación de Farmacéuticos Americanos, y CAMA, se dirigieron a los principales motores de búsqueda expresando su preocupación acerca de las farmacias fraudulentas. “Nunca recibimos respuesta de Google y Yahoo,” afirma Foster. “Finalmente supimos de Microsoft y nos indicaron que mirarían el problema.”

Horton y Bruen afirman que tienen pensado investigar otros motores de búsqueda adicionales.

Actualizado el 6/8/09: Un portavoz de Microsoft, en respuesta al informe, afirmó que "Nos hemos tomado estas afirmaciones muy en serio y estamos investigando el problema." Las normas de publicidad de Microsoft afirman que sólo las farmacias en los EE.UU. y Canadá pueden dirigirse al mercado de los EE.UU.