.

Cambio Climático

Las empresas con certificado "100% renovable" no son tan verdes como se pintan

1

Los Certificados de Energía Renovable son cada vez más fiables pero es casi imposible confirmar su equivalencia energética real

  • por Richard Martin | traducido por Teresa Woods
  • 30 Septiembre, 2015

Foto: Equinix suplementará la energía para todas sus operaciones en California, incluido este centro de datos de Silicon Valley, con energías renovables que se introducirán a la red energética de San Diego.

La semana pasada nueve empresas, incluidas Starbucks, Walmart, Procter&Gamble y Johnson&Johnson, anunciaron que se unirán al RE100, un registro de las empresas que se han comprometido a obtener el 100% de la energía que consumen de fuentes renovables. Eso eleva la suma a 36 importantes empresas que se han unido al programa, incluida la primera empresa india, el proveedor de servicios informáticos Infosys, y la primera empresa China, Elion Resources Group.

Existen múltiples definiciones de "100% renovable", sin embargo, y hasta ahora ninguna incluye la obtención real de toda su energía de plantas eólicas, solares, geotermales o de biocombustible. Y en muchos casos, las empresas que se han comprometido públicamente a convertirse en 100% renovables no han proporcionado un plazo concreto para ello.

En Estados Unidos, la bajada del precio de las energías renovables, junto con políticas gubernamentales cada vez más limitantes, la presión por parte de los accionistas y del público general, y un creciente conjunto de pruebas de que la elección de energías renovables en lugar de combustibles fósiles proporciona beneficios reales están impulsando esta tendencia. Pero la consecución de este objetivo todavía incluye un conjunto complicado de decisiones, compromisos, duras negociaciones con las energéticas y maniobras financieras.

El año pasado el Instituto de los Recursos Mundiales y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) publicaron Los principios para los consumidores de energías renovables, una especie de guía de compras que ayuda a las empresas a desarrollar estrategias para volverse 100% limpias. Una manera es comprar Certificados de Energías Renovables (REC, por sus siglas en inglés), o créditos que permiten que las empresas se declaren como fuentes 100% renovables sin que obtengan su energía directamente de paneles solares ni estaciones eólicas. Hay numerosas empresas que ofrecen estos certificados; la guía online del Departamento de Energía estadounidense nombra 17 proveedores en Estados Unidos. Cada crédito representa un megavatio-hora de energía renovable producido por el operador de la planta que vende el certificado en el mercado libre mediante uno de los intermediarios mencionados más arriba.

Por ejemplo, una empresa podría alimentar parcialmente una de sus fábricas con electricidad procedente de un cercano parque solar mientras compre créditos verdes para compensar la energía restante consumida por la fábrica. Una vez que el certificado se haya vendido y haya sido reclamado por el comprador, normalmente "se jubila" de forma nominal, aunque se producen instancias de doble registro con cierta frecuencia.

En teoría, el sistema debería proporcionar una demanda adicional para las energías renovables, en lugar de energía procedente de plantas de combustibles fósiles; en la práctica, resulta prácticamente imposible confirmar que un crédito renovable reemplace una megavatio-hora de, digamos, una planta a carbón. La venta de estos créditos beneficia a los productores de energías renovables, esencialmente aumentando los beneficios conseguidos con una unidad determinada de energía vendida. Pero la afirmación de que proporcionan aumentos en la capacidad de las energías renovables resulta difícil de demostrar. Daniel Press, el director de Estudios Medioambientales de la Universidad de California en Santa Cruz (EEUU), proporciona un resumen de los retos de los REC aquí.

El sistema para proporcionar, comprar y verificar estos certificados sigue siendo un batiburrillo de múltiples proveedores y sistemas de verificación que varían de estado en estado y de país en país. Mientras que algunos países han aprobado leyes que obligan a una auditoria externa de cualquier afirmación corporativa de energías limpias, muchos otros no. En Estados Unidos a menudo son los responsables de la red eléctrica, como las organizaciones de transmisión regionales que rastrean y verifican estos certificados, pero el sistema no es infalible.

"Nadie impedirá que afirmes que tu proyecto es '100% renovable' si compras compensaciones o créditos de algún lugar lejano", dice Matt Baker, un agente del programa medioambiental de la Comisión Hewlett de los Servicios Públicos y un antiguo comisionado de la Comisión de Servicios Públicos de Colorado (EEUU). "Puedes comprar los REC en Amazon de energía hidráulica que pueden no existir".

Existe una pronunciada distinción entre los mercados donde los usuarios energéticos y de los servicios públicos compran créditos para cumplir con los estándares de portfolio renovable u otras reglas impuestas por sus gobiernos, y mercados donde las empresas los compran de forma voluntaria. En el segundo supuesto, los precios de los créditos verdes han caído tanto que el sistema de certificados se ve incapaz de cumplir con su misión real: impulsar la adición de nuevas capacidades de generación de energías limpias a la red.

El gigante de la salud Johnson&Johnson, que forma parte del RE100, unió fuerzas con el Instituto de Recursos Mundiales a principios de la década de 2000 para ayudar a moderar los mercados de certificados de energías renovables. "En algunos mercados funcionó, y en otros no", dice Jed Richardson, el director global de Energías de Johnson & Johnson. "El precio de los REC cayó tanto que no impulsaban el cambio que buscábamos. Nos distanciamos de la compra de créditos de energías limpias porque decidimos que nos iría mejor invertir en la generación de energías renovables en nuestras instalaciones".

Las empresas también pueden ayudar a financiar el desarrollo de bienes renovables que alimentan las redes eléctricas en las zonas donde operan. Facebook, por ejemplo, ayudó a construir una granja eólica en Iowa (EEUU) para proporcionar energía eólica a la red regional. Facebook cobrará certificados por el valor de 138 megavatios de energía renovable para cubrir los 138 megavatios que consume su centro de datos en Altoona, Iowa. La empresa operadora de centros de datos Equinix unirá fuerzas con SunEdison en la construcción de la granja solar del Monte Signal de 150 megavatios en Calexico, California (EEUU) que se conectará con la red eléctrica y de gas natural de San Diego. Bajo un acuerdo de compra energética, Equinix cobrará certificados por el valor de 105 megavatios – lo suficiente para las operaciones de la empresa en California, incluidos su sede central en Redwood City y 11 centros de datos repartidos por todo el Estado.

Desafortunadamente, las energías renovables no podrán cumplir con toda la demanda de las fábricas y grandes plantas industriales en un futuro previsible. La mayoría de las empresas optarán por una mezcla de créditos verdes y la compra directa de energías renovables para llegar a calificarse como 100% renovables.

"Naturalmente habrá una combinación de ambos", dice Tomi Rintanen, el director de Sostenibilidad de Vaisala, un fabricante finés de equipos de medición y monitoreo del tiempo, las condiciones meteorológicas y las operaciones industriales. Vaisala tiene paneles solares que proporcionan el 20% de la energía consumida en sus instalaciones en Finlandia y el norte de Colorado (EEUU), además de un sistema geotermal que calienta y enfría su sede central de Vantaa (Finlandia). La empresa compra REC de proveedores energéticos locales para cubrir el resto de su consumo energético.

El sistema para Certificados de Energías Renovables verificables es una herramienta interina y algo desastrosa para facilitar el uso total de energías renovables – representa "el estándar más bajo", según Letha Tawner, la directora de Innovaciones de Servicios Públicos del Instituto de los Recursos Mundiales. Pero de momento es el mejor sistema disponible.

Cambio Climático

  1. La paradoja de la reducción del dióxido de azufre sobre el cambio climático

    A medida que el aire se vuelve más limpio, el mundo también pierde un importante efecto refrigerante.

    Un gran carguero de contenedores surca el océano
  2. Prolongar la vida útil de los reactores nucleares para limpiar la red eléctrica

    Un parque nuclear envejecido aún puede contribuir a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero

    Un turbogenerador en el Centro Energético de Indian Point de 2021
  3. El incierto futuro de la geoingeniería solar tras el fracaso del experimento de Harvard

    Algunos observadores sostienen que el fin de SCoPEx debería marcar el final de tales propuestas. Otros afirman que cualquier experimento futuro debería desarrollarse de forma muy distinta

    Un diagrama del globo SCoPEx tachado con una "X" roja flota sobre un fondo azul con partículas negras