¿Por qué llevar una pulsera especial de seguimiento de actividades si puedes disponer de las mismas funcionalidades mediante las gafas que ya llevas puestas en la cara?

VSP Global – cuya división de gafas Marchon fabrica y distribuye gafas para marcas como Nike y Calvin Klein – está desarrollando unas gafas que afirma podrán rastrear con precisión los pasos que da el portador. Y a cambio de Google Glass, el dispositivo abultado que Google retiró del mercado en enero, las gafas del llamado Proyecto Génesis de VSP utilizan una tecnología que prácticamente está oculta.  

VSP ha estado probando un prototipo de las gafas con sus empleados y pronto arrancará un programa piloto con personas ajenas a la empresa con la esperanza de lanzarlas al mercado el año que viene, afirma el colíder del laboratorio de investigación de VSP que trabaja en el proyecto, Jay Sales.

La popularidad de los dispositivos portables de fitness como los de Fitbit y Garmin se ha disparado en los últimos años. Datos recientes de la agencia de investigación tecnológica IDC indican que los envíos de dispositivos portables se triplicaron durante los primeros tres meses de 2015, alcanzando los 11,4 millones. En su mayor parte se tratan de pulseras inteligentes.

Muchos de los consumidores que compran estos dispositivos no los llevan puestos durante mucho tiempo. La empresa consultora de tecnología Endeavour Partners estimó recientemente que un tercio de los compradores en Estados Unidos acaban abandonándolos durante los primeros seis meses. Los motivos seguramente varían, pero VSP espera que incorporar la tecnología en artículos que muchos de nosotros ya llevamos a diario de por sí resulten más atractivos. Y Sales dice que se cree que añadir esta tecnología a las gafas no acarreará una subida del precio para los consumidores respecto a las monturas de gafas convencionales. "Esperamos que esto sea ubicuo en todo lo que fabricamos", afirma.

Sales me enseñó un prototipo: una montura negra sin muchos adornos, fabricada por una marca de Marchon llamada Dragon. La patilla izquierda de las gafas contiene un acelerómetro, un giroscopio, un magnetómetro y una batería recargable. Se conectan mediante un sistema Bluetooth de baja carga eléctrica con una app de smartphone que registra los pasos y deriva el número de calorías quemadas, dice Sales. Actualmente las gafas del Proyecto Génesis tienen una autonomía de cuatro horas.

Se notaba que la patilla izquierda era más gruesa que la derecha, pero en general las gafas no tenían un aspecto demasiado inusual – desde luego se asemejaban mucho más a un par de gafas normales que, digamos, Google Glass (ver Google Glass ha muerto, larga vida a las gafas inteligentes).

Pero para conseguir que el Proyecto Génesis sea atractivo para un gran número de usuarios de gafas, VSP tendrá que superar varios obstáculos. El prototipo parecía pesar más que las gafas convencionales. Es difícil creer que esto no acabara siendo molesto, al menos al principio.

También está el problema de cómo se cargan las gafas. Ahora mismo, un cargador se fija a las gafas mediante dos pequeños puntos metálicos ubicados en el interior de la pata izquierda. Pero Sales no cree que esta solución sea lo suficientemente elegante ni cómoda, especialmente en comparación con quitarse las gafas y dejarlas en algún sitio. "Tardé un par de semanas en acostumbrarme a las gafas", reconoció.