Si gato con guantes no caza ratones, crowdfunding sin gato no caza dinero. Más allá del antiguo uso dado al felino como exterminador de roedores, un estudio del Instituto Tecnológico de Georgia (EEUU) ha descubierto que estas mascotas juegan un papel clave a la hora de promover la financiación de los proyectos de micromecenazgo. Las iniciativas cuyas descripciones, y por tanto objetivos, incluyen el término gato tienden a recibir fondos.

La nueva utilidad de estas mascotas se desprende de un análisis sobre los factores involucrados en el éxito de estas iniciativas. El lenguaje utilizado en la descripción de dichos proyectos predice en casi un 60% si el objetivo económico de la propuesta se logrará o no, según el artículo. De entre las 100 frases y palabras más asociadas a estos triunfos, el gato se encuentra en la posición 18 de lista.

Los resultados se basan en el análisis de más de nueve millones de términos contenidos en las descripciones de 45.000 iniciativas de crowdfunding. Todas ellas, incluidas en la plataforma de micromecenazgo Kickstarter. No obstante, la baja frecuencia de la mayoría de expresiones limitó el estudio a 20.931 frases.

Aunque la investigación también analizó la influencia de otras 59 variables asociadas a este tipo de proyectos, el coautor del estudio, Tanushree Mitra, considera “muy sorprendente” el elevado impacto que el lenguaje ha resultado tener frente a otros factores como, por ejemplo, el tipo de proyecto. Por su parte, la plataforma de Kickstarter ha declinado hacer declaraciones a MIT Technology Review en relación a cualquier conclusión del estudio.

El texto califica como “desconcertante” la presencia del gato en la lista. Aunque el artículo se atreve a atribuir el impacto gatuno “a la comúnmente aceptada idea de que internet ama a los gatos”, Mitra reconoce que “no es capaz de explicar algunas de las frases más valoradas en la clasificación”.

Mientras se escribe este artículo, una iniciativa en la mencionada plataforma para desarrollar juguetes inteligentes para estas mascotas con un objetivo de financiación de 15.000 dólares (unos 11.000 euros) ya ha recaudado más de 151.000 dólares (111.000 euros), lo que supone una cifra diez veces mayor de la necesaria) a falta de 56 horas para que concluya su plazo.

Frente al centenar de términos asociados al éxito, felinos incluidos, otras 100 frases sugieren el fracaso de los proyectos. En muchos casos, la pertenencia de los términos a cada una de las categorías sí parece tener una explicación más lógica. La investigación ha creado un Top 5 de cada una de ellas.

Aunque las frases pertenecen a descripciones en inglés, Mitra asegura que “las conclusiones son extensibles a otros idiomas, como el castellano”. Según sus traducciones, las cinco claves linguísticas del éxito son: también reciben dos, mención a tu, dada la oportunidad, tu continuada, y podemos permitirnos. En el otro extremo, entre aquellas relativas al fracaso, destacan: no se ha podido, incluso un dólar, más tarde yo, un vacío (o un espacio en blanco), y esperanza de obtener.

El autor principal del estudio, Eric Gilbert, considera que las frases de predicción positiva “exhiben los principios generales de la persuasión, […] siguen el concepto de reciprocidad y generan una percepción de participación social”. En general, están relacionadas con campañas que ofrecen un regalo a cambio, que se pueden personalizar a gusto de los mecenas y que se asocian a productos muy exclusivos. O a gatos.

A pesar de que el objetivo de los proyectos de crowdfunding es, precisamente, recaudar dinero, el estudio concluye que “pedirlo de forma explícita” no gusta entre los posibles inversores. Las iniciativas que no demuestran seguridad o garantías también resultan menos atractivas.

Christina Aguilera

Diez puestos por debajo de los gatos, en el número 28 de la lista, se encuentra el término christina, que los autores asocian a la cantante Christina Aguilera (quien, probablemente, no subía tanto en una pole desde sus éxitos de ventas, alrededor del año 2000). Sin embargo, al igual que sucede con los felinos, el equipo tampoco se explica la presencia de la diva en esta clasificación. Según Mitra, esto sucede tanto aquí como en “cualquier otro estudio estadístico”.

Más allá del lenguaje, entre las otras 59 variables analizadas, el estudio también ha detectado aquellas que más se asocian al éxito o al fracaso de las iniciativas. Entre los factores que más promueven el objetivo de financiación de una propuesta se incluye la presencia de vídeo, las actualizaciones del proyecto y la conexión con Facebook. Por el contrario, la duración está negativamente relacionada con el logro de dicha meta.

Pero un vídeo, un gato y una descripción persuasiva no garantizan que todos los proyectos salgan a flote. Algunas de las 40 categorías y subcategorías establecidas para cada tipo de proyecto “han demostrado tener una importancia muy significativa”, explica Mitra. Es el caso de las iniciativas relacionadas con el diseño gráfico, el teatro, los juegos y la alimentación, entre otros. Por el contrario, la ilustración y el periodismo encabezan la lista de proyectos menos exitosos, seguidos de aquellos relacionados con el pop, el rock y la música country.

Los hallazgos de esta investigación podrían dar lugar a “nuevas características para las plataformas de crowdfunding”, según asegura el propio texto. En este sentido, plantea herramientas que “analicen el contenido de las descripciones […] y emita notificaciones cuando estas contengan palabras y frases relacionadas con predicciones negativas”.

Sobre la posibilidad de que esta nueva función pudiera dar lugar a que todos los proyectos se igualen unos a otros, el coautor del estudio explica que “no puede asegurarlo hasta que no lo analice". A la espera de estos hallazgos, aquellos que quieran iniciar un proyecto siempre pueden tratar de asegurar el éxito con un gato que les cace el dinero.