.

Inteligencia Artificial

Los sensores de tu coche están a punto de acortar tu viaje hasta el trabajo

1

Here usará y combinará la información de los vehículos conectados para producir información más precisa sobre el estado de la carretera y que el coche actúe en consecuencia

  • por Jamie Condliffe | traducido por Teresa Woods
  • 06 Octubre, 2016

Los partes de tráfico se están volviendo altamente tecnológicos. El servicio de mapas Here ha anunciado que empezará a utilizar la información recogida por los sensores de los coches para proporcionar datos más precisos a los conductores sobre el estado de las carreteras.

La empresa, que fue adquirida de manera conjunta por BMW, Audi y Daimler en 2015, se aprovechará del hardware de cientos de miles de vehículos fabricados por las tres automovilísticas para recopilar datos, según Reuters. Con el tiempo, otros fabricantes también podrían aportar sus datos. Al analizar la información de los sensores, Here irá aprendiendo cosas sobre el tráfico y compartirá sus conocimientos con otros coches para ayudarles a planificar la ruta.

Ya existen bastantes servicios de informes del tráfico basados en el crowdsourcing. Waze, por ejemplo (actualmente propiedad de Google) adquiere datos sobre las condiciones en carretera de conductores que los comparten mediante una app. Y Urban Engines (también adquirida recientemente por Google) recopila datos de los peatones para predecir la congestión en centros urbanos.


Crédito: Here.

Here, sin embargo, afirma ser la primera empresa en emplear los sensores de a bordo. Bloomberg sugiere que el software de la empresa se dará cuenta, por ejemplo, de si los limpiaparabrisas se activan y lo interpretará como una pista de que el tráfico se ralentizará, mientras que en coches con cámaras leerá las señales viales de carácter temporal y reconocerá las obras. Tales datos se subirán de forma anónima a la nube y después se compartirán con el resto de conductores. 

En teoría, Here proporciona mapas a hasta el 80% de los vehículos con sistemas integrados de navegación por satélite en Estados Unidos y Europa, y espera que otros fabricantes automovilísticos paguen para proporcionar a sus conductores unas opciones de ruta más eficientes.

No es la única empresa que empieza a aprovecharse de los sensores de a bordo de los coches. La start-up Civil Maps ha empezado usarlos como un medio de bajo coste para generar mapas precisos que podrán ser empleados por los futuros coches autónomos. Y Comma.ai planea aprovecharse de los radares del piloto automático para alimentar su línea de productos que convierten coches convencionales en autónomos.

Desde luego, la nueva iniciativa de Here también mantendrá un ojo puesto en la conducción autónoma. El proyecto es especialmente notable por su forma de vincular los datos de coches fabricados por distintas automovilísticas en una única base de datos en la nube. Estas empresas normalmente se muestran celosas respecto a sus sistemas propietarios. Eso abrirá la posibilidad de que los coches de todo tipo, tanto convencionales como autónomos, se comuniquen entre sí con mayor facilidad de lo que hasta ahora ha sido posible. Eso será esencial si queremos que nuestros vehículos empiecen a conducirse solos.

Pero mientras tanto, podría reducir sus trayectorias al trabajo y de vuelta a casa en varios minutos.

(Read more: Reuters, Bloomberg, Google quiere que compartas coche para ir al trabajoEl nuevo negocio de crear sistemas que convierten en autónomo cualquier coche, Google Could Reinvent Commuting)

Inteligencia Artificial

 

La inteligencia artificial y los robots están transformando nuestra forma de trabajar y nuestro estilo de vida.

  1. Sam Altman afirma que los agentes de ayuda están a punto de convertirse en la función estrella de la IA

    El Director General de Open AI afirma que no necesitaremos nuevo hardware ni muchos más datos de entrenamiento para conseguirlo.

    Sam Altman, CEO de OpenAI
  2. El polígrafo de la IA: esta herramienta ayuda a detectar patrañas en chatbots

    En muchas situaciones de alto riesgo, no merece la pena arriesgarse con grandes modelos lingüísticos. Saber qué resultados hay que desechar puede arreglarlo. 

    Un toro mirando al frente con una máquina de polígrafo alrededor del cuello. Detrás, espirales de texto superpuestas.
  3. La ley de la IA de la UE en cuatro claves

    El trabajo duro empieza ahora.

    Un candado azul con las estrellas amarillas de la UE de fondo