Los usuarios de Gmail ya no necesitarán una conexión a Internet para acceder a sus bandejas de entrada y escribir y enviar mensajes. Dentro de los próximos días, en un empujón actual de llevar la tecnología cloud a las masas, Google introducirá una característica experimental nueva a GmailLabs llamada Offline Gmail. Esta característica sincroniza el email del ordenador del usuario con los servidores de Google cuando está online y tiene la apariencia de Gmail al estar offline. Depende de Gears, un software que se puede descargar, que sincroniza y hace el caché de datos para aplicaciones de la Red como Google Docs y Calendar.

Del mensaje de blog de Google:

Una vez que usas la herramienta, Gmail utiliza Gears para descargar el caché local de tu correo. Mientras estás conectado a la red, el caché se sincroniza con los servidores de Gmail. Cuando la conexión se pierde, Gmail pasa automáticamente al modo offline, y utiliza los datos almacenados en el disco duro de tu ordenador en vez de la información que se envía a través de la red. Puedes leer los mensajes, ponerles estrellas y etiquetarlos, y hacer todas las cosas que generalmente haces cuando lees tu correo de Red online. Cualquier mensaje que envíes mientras estás offline se ubicará en tu bandeja de salida, y se enviará automáticamente cuando Gmail detecte una conexión. Si estás con una conexión poco fiable o lenta (como cuando "pides prestado" el inalámbrico de tu vecino), puedes optar por el "modo comunicación cortada", que es algo intermedio: utiliza el caché local como si estuvieras desconectado, pero aún así sincroniza tu correo con el servidor que subyace. Nuestra meta es proveer casi la misma experiencia de Gmail basada en el explorador si estás utilizando los datos en el caché en tu ordenador o dirigiéndote directamente al servidor.

Según el mensaje, los empleados de Google han estado usando estas herramientas ya por algún tiempo, lo que no es sorprendente dado que la mayoría de los elementos nuevos pasan por pruebas por parte de los empleados de Google mucho antes de ser lanzados al público en general. Para tener una imagen fugaz de lo que es el futuro de la computación, es útil analizar los hábitos de los empleados de Google.

Por supuesto, el empuje de la tecnología de cloud no es sólo de Google. Adobe ofrece AIR, una plataforma para transformar las aplicaciones en software que parace estar operando con el disco duro de un ordenador. Y Microsoft, por su lado, está tratando de crear un sistema operativo que funciona bien con la "cloud".